Immunotec

En la actualidad pueden encontrarse distintas formas de elevar los niveles de glutatión en el cuerpo, entre ellas tenemos las siguientes:

 

1) Capsulas de glutatión. Esta es una opción que no tiene ningún efecto en nuestra salud, esto se debe a que la molécula del glutatión es destruida por nuestro proceso digestivo, de manera que no puede aprovecharse por nuestro cuerpo.

 

 

2) Inyecciones de glutatión. Estas sin inyecciones directas al torrente sanguíneo y han sido utilizadas por ya varios años en el tratamiento de pacientes con intoxicaciones severas, sobredosis, Parkinson e incluso Autismo. El costo es bastante alto y no tienen una alta biodisponibilidad, pues la mejor forma de elevar los niveles de glutatión es que nuestras mismas células lo produzcan en su interior. Inundar el cuerpo con glutatión ayuda en ciertos casos, pero no tiene los resultados esperados.

 

 

3) Parches de glutatión. Parches que se pegan al cuerpo y liberan glutatión al torrente sanguíneo. Al igual que las inyecciones, se inunda nuestro organismo con un glutatión que en su mayor parte será eliminado, pues no es natural, ni producido al interior de nuestras células, no funciona como podría esperarse.

 

 

4) NAC (N-Acetyl-Cisteína). Es una de los precursores más utilizados por la medicina para casos de emergencia donde los pacientes requieren elevar sus niveles de glutatión. Ha sido utilizado con resultados positivos en muchos estudios clínicos en humanos en distintas enfermedades desde Cáncer hasta SIDA. Sin embargo es un medicamento, y algunos de los problemas que presenta es que al ser un medicamento, presenta cierta toxicidad, por lo que no puede tomarse por largos periodos, además de elevar los niveles de glutatión rápidamente y bajan rápidamente en unas horas, tiene un corto periodo de vida. Debe ser ingerido o inyectado en el cuerpo varias veces al día y pacientes han reportado efectos secundarios como erupciones cutáneas, sibilancias, vómitos, nauseas, calambres y diarrea. Debe ser administrado por profesionales de la medicina pues se han reportado muertes como consecuencia de su uso.

 

 

5. Immunocal. Inicialmente llamado HMS-90 es una proteína inactiva no desnaturalizada de suero de leche creada en los años 70′s por un equipo de investigadores de la Universidad de Montreal, entrega al cuerpo Cistina (Dos moléculas de cisteína) de una manera que el cuerpo puede utilizarla inmediatamente para la producción de glutatión de forma intracelular, es decir, de la forma más natural posible. Su historia está respaldada por estudios e investigaciones en desordenes asociados con alto nivel de estrés oxidativo y baja producción de glutatión.